Por: Devanny Benitez Muñeton – Foto: Sergio Rios
¿Eres mata o hierba?
Una hierba perenne de gran corpulencia crece por hectáreas en Urabá.
Por muchos mata, por otros hierba. Vaya altercado tonto y sin fin. Endeble, sin sentido.
Finita hierba que desplomas tus fragmentos aéreos y los deja decaer al final de tu producción. Sin más, sin utilidad, sin malestar. Y perdurable porque de tus entrañas, terminando su ciclo, da vida a un brote progenitor que reemplaza a su matrona una vez se despoja de esta tierra fértil.
Finita mata de tronco, que es más seudotallo que tronco. Que engañas a simple vista. Que dilatas las pupilas de quien te mira ondear con destreza las hojuelas de tu descendencia y de ti tus hojas verdaderas henchidas de vaina, pecíolo, nervadura y limbo.
Así eres tú, difícil de advertir. Más urabaense que yo, más urabaense que otros.